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"Con el aislamiento, mucha gente empezó a poner atención a síntomas que se camuflaban"

Tras un año de aislamiento y distanciamiento, el Dr. Matías Varela explica que la pandemia permitió a mucha gente iniciar tratamientos que se solapaban por el estigma de la salud mental

¿Aumentaron las consultas o derivaciones de pacientes por efecto de la pandemia?

Por un lado, aumentaron las primeras consultas de gente que quizás nunca antes había considerado necesario un tratamiento en salud mental, pero a la vez ocurrió lo mismo que con la mayoría de las especialidades médicas; aquellos pacientes que se encontraban en tratamiento, muchos de ellos cuadros crónicos y graves, perdieron el acceso al mismo dadas las restricciones y la dificultad de adaptación que significó la virtualidad.

¿Cuáles son los principales cuadros que se ven?

Muchos pacientes que consultaron por primera vez durante la pandemia presentan cuadros de ansiedad, algunos con síntomas somáticos como palpitaciones, sudoración excesiva, o sensación de falta de aire. Son síntomas que quizás ya habían tenido antes, pero que hasta ahora nunca se los habían atribuido a una causa psíquica. Creo que con la pandemia, las restricciones y el aislamiento, mucha gente empezó a poner más atención sobre esos síntomas que antes quizás se camuflaban entre la vorágine del día a día, y eso los llevó a finalmente realizar la consulta.

¿Saben los pacientes que lo que les está pasando es producto de la pandemia?

Si bien no considero que esos síntomas sean “producto” de la pandemia, si hay muchos pacientes que encontraron allí un justificativo que les permitió acercarse e iniciar tratamiento. Existe todavía mucho tabú sobre la salud mental. De alguna manera, muchos pacientes percibieron que el estigma es menor si los síntomas de ansiedad o tristeza son producto de una pandemia – a diferencia de una cuestión de “debilidad” personal -, y eso les permitió llegar a la consulta a gente que quizás de otra manera no hubiese consultado, aunque los síntomas sean los mismos.

¿Se puede hablar ya de un efecto “social”?

No se si existen estadísticas al respecto, pero creo que desde el principio se trató de un cuadro social. La angustia que ocasionó y aún ocasiona la pandemia afecta a todos los sectores y a todos los individuos, con sus particularidades por supuesto, pero al afectar a cada uno afecta también al entramado social.

¿Es igual de simple o natural para un niño o un anciano sociabilizar ahora tras tanto tiempo de falta de socialización ?

Puede que exista un primer período de readaptación, de pocos días, o que quizás hayan cambiado algunas formas de relacionarse, pero la sociabilización sigue siendo en esencia igual de simple y natural que lo fue siempre. Somos seres gregarios; lo fuimos siempre desde el inicio de la especie y lo seguiremos siendo, independientemente de cuantas pandemias, guerras, glaciaciones y demases hayamos atravesado o resten atravesar.

¿Te vacunaron como personal de salud? ¿Sentís que estás viviendo de nuevo la normalidad?

Sí, me vacunaron como personal de salud. En lo personal, me manejo aún con los mismos cuidados que durante toda la pandemia. No hay evidencia sólida aún respecto de la capacidad de contagio de los vacunados ni del tiempo de inmunización que provee la vacuna. Todavía falta para la normalidad.

*Entrevista en vivo en El Diario Sur - Radio por FM EXTREMO

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